Pivovar Primátor, la cervecería municipal de Náchod, una cuidad al noreste de Praga, es un especialista en cervezas especiales. Tiene una muy extensa línea de productos, diez cervezas que van desde la nealko, hasta la Double; más una marca de bebidas sin alcohol a base a lúpulo.
Es también una cervecería muy innovadora, en los últimos dos años sacó al mercado tres cervezas nuevas. Una excelente Polotmavé 13° y dos poco tradicionales en el mercado checo, las también muy buenas Weizen y English Pale Ale.
Estoy preparando una columna sobre ellas, hoy de la que voy a hablar es la Double o 24°, la más pulenta de todas. Su contenido alcohólico, 10%, y su color oscuro la ponen en la categoría de las Porter checas, a no confundirse con el estilo de cerveza del mismo nombre. Los checos llaman Porter a todas las cervezas lager oscuras de alga graduación de azúcar. La double está elaborada con malta de cebada, malta de trigo, lúpulo y azúcar.
Al servirla vemos una cerveza bien oscura, espesa a pesar de ser filtrada, a contraluz notamos algunos destellos ocres. La compacta espuma es de color beige y se disipa lentamente. No tenemos que acercar demasiado la nariz para empezar a sentir el intenso aroma a caramelo, al cual luego se le suman algo de cacao y unas suaves notas herbales. No hace falta leer la etiqueta para saber que estamos frente a una cerveza bien fuerte; y no estamos equivocados. Un intenso dulzor nos invade el paladar al dar el primer sorbo, tiene un cuerpo impresionante y el caramelo de su sabor es intenso y muy persistente. Pero no es todo lo que nos ofrece esta cerveza cuando la tomamos, tiene un muy interesante final amargo que lentamente se diluye para volver a dejar lugar al prevalente caramelo. Es imposible tomarla rápido, no nos deja.
La Primátor Double es una de las pocas cervezas que conozco que se puede tomar mientras se come chocolate u otros dulces; es también excelente para cocinar o para marinar. A la vez, no es para todo los gustos, si no se es fanático de las cervezas dulces, mejor ni probarla. Tampoco es recomendable tomarla en un día caluroso y con mucha sed, a menos, claro que uno tenga ganas de dormirse una buena siesta luego.
Es también una cervecería muy innovadora, en los últimos dos años sacó al mercado tres cervezas nuevas. Una excelente Polotmavé 13° y dos poco tradicionales en el mercado checo, las también muy buenas Weizen y English Pale Ale.
Estoy preparando una columna sobre ellas, hoy de la que voy a hablar es la Double o 24°, la más pulenta de todas. Su contenido alcohólico, 10%, y su color oscuro la ponen en la categoría de las Porter checas, a no confundirse con el estilo de cerveza del mismo nombre. Los checos llaman Porter a todas las cervezas lager oscuras de alga graduación de azúcar. La double está elaborada con malta de cebada, malta de trigo, lúpulo y azúcar.
Al servirla vemos una cerveza bien oscura, espesa a pesar de ser filtrada, a contraluz notamos algunos destellos ocres. La compacta espuma es de color beige y se disipa lentamente. No tenemos que acercar demasiado la nariz para empezar a sentir el intenso aroma a caramelo, al cual luego se le suman algo de cacao y unas suaves notas herbales. No hace falta leer la etiqueta para saber que estamos frente a una cerveza bien fuerte; y no estamos equivocados. Un intenso dulzor nos invade el paladar al dar el primer sorbo, tiene un cuerpo impresionante y el caramelo de su sabor es intenso y muy persistente. Pero no es todo lo que nos ofrece esta cerveza cuando la tomamos, tiene un muy interesante final amargo que lentamente se diluye para volver a dejar lugar al prevalente caramelo. Es imposible tomarla rápido, no nos deja.
La Primátor Double es una de las pocas cervezas que conozco que se puede tomar mientras se come chocolate u otros dulces; es también excelente para cocinar o para marinar. A la vez, no es para todo los gustos, si no se es fanático de las cervezas dulces, mejor ni probarla. Tampoco es recomendable tomarla en un día caluroso y con mucha sed, a menos, claro que uno tenga ganas de dormirse una buena siesta luego.
Definitivamente nuestro método de 1 a 5 chopps para calificar las cervezas, con las que tomás vos allá nos quedaríamos siempre clavados en el 5.... :)
ResponderBorrarQue loco poder decir que la municipalidad tiene su propia cervecería... y con semejante calidad... Aca sería seguramente algo intomable...
Por que los alemanes son tan famosos por sus cervezas y los Checos no tanto? O al menos para nosotros es toda una revelación que la Republica Checa sea el paraiso cervecero...
Por qué los alemanes son más famosos que los checos cuando hablamos de birra? Una sola palabra, comunismo. Mientras los checos estaban en la sombra de los comunistas, las cervecerías alemanes se largaron al mundo. Pero la pils es originaria de chequia. Viví varios meses en Alemania y tomé muy buenas cervecezas; pero ningún pais se acerca a los checos. No estoy hablando de ninguna cerveza en particular, sino de la industria en general, desde las cervecerías artesanales, hasta las industriales más grnades. Nadie, pero nadie en el mundo le hace sombra a los checos.
ResponderBorrarEn cuanto a las cervecerías municipales, es un resabio de la histórica industria cervecera checa. Algún día voy a escribir una columna al respecto, porque vale la pena.
Y sí, Chequia, es el paraiso cervecero, recién vuelvo de U Medvídku y tengo el alma llena de la X33, ya estoy escribiendo una columna al respecto, estarse antentos....
Otro problema de la fama se Rep. Checa es que si bien se habla de Alemania como país cervecero, se recurre a Bélgica para hablar de cervezas de calidad. Cervezas checas he probado me parece sólo la Urquell, pero obviamente le creo a Max, y es una pena que entre Bélgica y Alemania, que de todas maneras tienen buena cerveza, se coman a la tremenda producción en calidad y cantidad de Rep. Checa. Ojalá eso empieze a cambiar.¿Se ha visto algún avance respecto de eso Max?
ResponderBorrarMe parece que con el mercado interno que tienen, no estan muy preocupados en salir a competir por el premio a mejor pais cervecero a nivel mundial... :)
ResponderBorrarLas cervecerías checas están apuntando a la exportación. El mercado local está saturado y la única posibilidad de crecimiento es largarse afuera. Claro que las grandes marcas que pertenecen a los grandes grupos cerveceros la tienen más fácil para exportar. Sus dueños tienen más poder de negociación con las diabólicas cadenas de supermercados, y sé que hacen lo posible para dejar a las marcas más chicas, que hacen mejor y más barata cerveza, fuera de los súper, incluso acá. Es más fácil conseguir la basura de Stella Artois que una Svijany.
ResponderBorrarIgual, algunas cervecerías chicas han podido lograr algo. El año pasado vi en un hipermercado en Madrid una botella de Primátor, junto con las Pilsner Urquell, Budvar, Krušovice y Staropramen.
Černá Hora y alguna otra empezaron a exportar a China y demás casos. Por qué no llegan a sudamérica debe ser un tema de costos de transporte, mercados demasiado chicos, y lo que llega parece ser solamente en lata.
Estoy de acuerdo con el comentario que hizo catador en otra entrada. Hay que probar todas las cervezas, aunque no estemos seguros de que nos guste, ahora yo no sé si gastaría una pequeña fortuna por una cerveza importada en lata. La calidad va a ser siempre inferior, no importa cuán buena sea la cerveza.