Siguiendo con mi larga y lenta recorrida por las cervezas premiadas por SPP en noviembre, le tocó el turno a las dvanátcky.
Se llama dvanactká a la cerveza fermentada históricamente a 12°Balling (dvanact en checo es doce) . Si bien esta nomenclatura se mantiene en el vocabulario popular, para varias de las cervecerías indutriales, en especial las más grandes, ahora se llaman ležák (que en checo significa lager). Nomenclaturas aparte, esta categoría de cervezas es, después de las desítky, la más popular y suelen ser las que aparecen en los institucionales de cada pivovar, además de ser las que más se encuentran en los mercados de exportación bajo el término Premium Lager o algo parecido. Su contenido alcóholico ronda el 5%.
Las tres que compartieron el podio son
1° Březňák světlý ležák
2° Opat světlý ležák
3° Bernard světlý ležák
Tres cervezas muy distintas, no sólo en la forma de su botella.
Como es costumbre empecé por la tercera, Bernard. A este pivovar lo conozco desde mis primeros días en Chequia y siempre me gustaron sus productos. Pionero de las cervezas industriales sin pasteurizar Pivovar Bernard es casi garantía de calidad. Su dvanactá no es excepción. Cuando la abrí y me iba a poner a sacar las fotos me di cuenta que había dejado la cámara en el dormitorio así que fui a buscarla, al volver a la cocina me asombró el intenso aroma a Saaz que emanaba de la botella como un genio liberado de su lámpara, espectacular. A la vista es una pilsner lager como tiene que ser, color dorado intenso y casi cristalino coronado por una espuma blanca como nieve. En el aroma siguen predominando la mezcla frutal y herbal típica de los saaz ahora con algo más de malta, sigue siendo prototípica, sigue siendo lo que una pilsner lager tiene que ser. Al tomarla es casi sedosa con un sabor predominantemente seco y herbal, pero con notas dulces que son casi un espejismo, pero que están ahí. Deliciosa.
Opat, la marca de Pivovar Broumov produce muy intersantes cervezas que, lamentablemente, son muy difíciles de conseguir en Praga. He oido que la empresa está en problemas y corre el riesgo de desaparecer, lo cual sería una verdadera lástima y espero no sea cierto. Su nueva poltomavý kvasnicový ležák is simplemente brillante y lo mismo podría decirse de su 17° de navidad. Pero volviendo a la dvanactká. Ya a primera vista tenemos una cerveza completamente diferente a la anterior. El dorado es más suave y el contenido del vaso algo más turbio, casi como si estuviese sin filtrar. El aroma es herbal e intensamente cítrico, casi como el de naranjas amargas. Al tomarla sorprende su amargor, intensamente lupulado muy cítrico también, tuve que volver a mirar la botella porque creía que había comprado su Bitter, pero no es así. Hacía mucho que no tomaba esta cerveza y simplemente quedé sin palabras ante tal sabor, que, para ser honestos, puede que no sea del gusto de todos ya que casi tapa todos los otros elementos de la cerveza, incluida la malta dejando pasar furtivamente unas suaves notas frutales. El sabor que deja es ácido y muy persistente, de nuevo algo que puede que no guste a algunos, pero que me pareció muy lindo para acompañar pescados a la parrilla o cornalitos o sardinas fritas.
Tuve que tomar una pausa para la ganadora y comer algo para limpiar mi paladar.
Pivovar Velké Březno es parte del grupo Drinks Union que es dueño de otras tres cervecerías, además de marcas de licores y, cabe decir, es de capitales checos (por ahora). La etiqueta de esta cerveza debe ser la más copiada en el mundo y tiene una interesante historia que algún día contaré. Si alguna vez tomé esta cerveza, fue hace mucho tiempo y pasó desapercibida, así que estaba curioso por ver cómo era la dvanactká 2007. Su color es dorado intenso con una espesa y persistente espuma de un angelical blanco, ni siquiera al servirla presenta carbonación alguna. Los aromas muy interesantes, combinando notas de hierbas secas con otras melosas y más frutales, podría decirse que es aroma en stereo ya que se pueden sentir cada una de las contrastantes notas al mismo tiempo, como si entrasen cada una por una fosa nasal distinta. Son las notas melosas y frutales las que predominan al paladar, una lager un poco más convencional que las anteriores con un final más largo y también frutal aunque se empiezan a sentir más las hierbas. Habrá que aprovechar y comprarla ahora antes de que Heineken compre el grupo Drinks Union y muy probablemente arruine la calidad de las cervezas.
Estas tres cervezas, de la misma categoría, golden lager, con similar tenor alcohólico son tan diferentes que le dan la mejor respuesta a la vieja pregunta, cuál es la mejor cerveza? Ninguna, elegir una sobre otra depende mucho de los gustos. Personalmente prefiero la Bernard, me parece un ideal punto intermedio entre el intenso amargor de la Opat y las notas más dulzonas de la Březňák. El premio fue el resultado de una cata ciega de todos los competidores y ganó el que más puntos obtuvo según el jurado, que no dejan de ser personas con sus gustos. Igual, felicitaciones a los tres pivovary por darnos la oportunidad de degustar tres productos totalmente distintos aunque en los papeles tendrían que ser iguales. Para taparles la boca a todos aquellos que dicen que las lagers (incluso las checas) son todas iguales.
Se llama dvanactká a la cerveza fermentada históricamente a 12°Balling (dvanact en checo es doce) . Si bien esta nomenclatura se mantiene en el vocabulario popular, para varias de las cervecerías indutriales, en especial las más grandes, ahora se llaman ležák (que en checo significa lager). Nomenclaturas aparte, esta categoría de cervezas es, después de las desítky, la más popular y suelen ser las que aparecen en los institucionales de cada pivovar, además de ser las que más se encuentran en los mercados de exportación bajo el término Premium Lager o algo parecido. Su contenido alcóholico ronda el 5%.
Las tres que compartieron el podio son
1° Březňák světlý ležák
2° Opat světlý ležák
3° Bernard světlý ležák
Tres cervezas muy distintas, no sólo en la forma de su botella.
Como es costumbre empecé por la tercera, Bernard. A este pivovar lo conozco desde mis primeros días en Chequia y siempre me gustaron sus productos. Pionero de las cervezas industriales sin pasteurizar Pivovar Bernard es casi garantía de calidad. Su dvanactá no es excepción. Cuando la abrí y me iba a poner a sacar las fotos me di cuenta que había dejado la cámara en el dormitorio así que fui a buscarla, al volver a la cocina me asombró el intenso aroma a Saaz que emanaba de la botella como un genio liberado de su lámpara, espectacular. A la vista es una pilsner lager como tiene que ser, color dorado intenso y casi cristalino coronado por una espuma blanca como nieve. En el aroma siguen predominando la mezcla frutal y herbal típica de los saaz ahora con algo más de malta, sigue siendo prototípica, sigue siendo lo que una pilsner lager tiene que ser. Al tomarla es casi sedosa con un sabor predominantemente seco y herbal, pero con notas dulces que son casi un espejismo, pero que están ahí. Deliciosa.
Opat, la marca de Pivovar Broumov produce muy intersantes cervezas que, lamentablemente, son muy difíciles de conseguir en Praga. He oido que la empresa está en problemas y corre el riesgo de desaparecer, lo cual sería una verdadera lástima y espero no sea cierto. Su nueva poltomavý kvasnicový ležák is simplemente brillante y lo mismo podría decirse de su 17° de navidad. Pero volviendo a la dvanactká. Ya a primera vista tenemos una cerveza completamente diferente a la anterior. El dorado es más suave y el contenido del vaso algo más turbio, casi como si estuviese sin filtrar. El aroma es herbal e intensamente cítrico, casi como el de naranjas amargas. Al tomarla sorprende su amargor, intensamente lupulado muy cítrico también, tuve que volver a mirar la botella porque creía que había comprado su Bitter, pero no es así. Hacía mucho que no tomaba esta cerveza y simplemente quedé sin palabras ante tal sabor, que, para ser honestos, puede que no sea del gusto de todos ya que casi tapa todos los otros elementos de la cerveza, incluida la malta dejando pasar furtivamente unas suaves notas frutales. El sabor que deja es ácido y muy persistente, de nuevo algo que puede que no guste a algunos, pero que me pareció muy lindo para acompañar pescados a la parrilla o cornalitos o sardinas fritas.
Tuve que tomar una pausa para la ganadora y comer algo para limpiar mi paladar.
Pivovar Velké Březno es parte del grupo Drinks Union que es dueño de otras tres cervecerías, además de marcas de licores y, cabe decir, es de capitales checos (por ahora). La etiqueta de esta cerveza debe ser la más copiada en el mundo y tiene una interesante historia que algún día contaré. Si alguna vez tomé esta cerveza, fue hace mucho tiempo y pasó desapercibida, así que estaba curioso por ver cómo era la dvanactká 2007. Su color es dorado intenso con una espesa y persistente espuma de un angelical blanco, ni siquiera al servirla presenta carbonación alguna. Los aromas muy interesantes, combinando notas de hierbas secas con otras melosas y más frutales, podría decirse que es aroma en stereo ya que se pueden sentir cada una de las contrastantes notas al mismo tiempo, como si entrasen cada una por una fosa nasal distinta. Son las notas melosas y frutales las que predominan al paladar, una lager un poco más convencional que las anteriores con un final más largo y también frutal aunque se empiezan a sentir más las hierbas. Habrá que aprovechar y comprarla ahora antes de que Heineken compre el grupo Drinks Union y muy probablemente arruine la calidad de las cervezas.
Estas tres cervezas, de la misma categoría, golden lager, con similar tenor alcohólico son tan diferentes que le dan la mejor respuesta a la vieja pregunta, cuál es la mejor cerveza? Ninguna, elegir una sobre otra depende mucho de los gustos. Personalmente prefiero la Bernard, me parece un ideal punto intermedio entre el intenso amargor de la Opat y las notas más dulzonas de la Březňák. El premio fue el resultado de una cata ciega de todos los competidores y ganó el que más puntos obtuvo según el jurado, que no dejan de ser personas con sus gustos. Igual, felicitaciones a los tres pivovary por darnos la oportunidad de degustar tres productos totalmente distintos aunque en los papeles tendrían que ser iguales. Para taparles la boca a todos aquellos que dicen que las lagers (incluso las checas) son todas iguales.
Al leer tus tres últimos artículos me han surgido un par de preguntas.
ResponderBorrarLa primera es referente a las cervezas checas de Navidad. En enero de este año, pude comprar una oferta muy buena de cerveza checa Primator. Una caja de 10 cervezas de medio litro por 6 euros. Un chollo de cazaofertas, resto de la feria de navidad- en la que estaba a unos 16 euros- y en la que por desgracia-pero para suerte mia- no tuvo mucho éxito. La etiqueta mostraba un paisaje nevado y ciertos adornos navideños. la cerveza se denominaba ekstra creo recordar.¿puede ser esta una de esas lager checas navideñas? Para mi gusto era realmente buena, con sus 6,3% de alcohol, su marcado perfume a lúpulo y un gran sabor queduraba en el paladar e invitaba al siguiente trago.
La otra pregunta ya que diseccionas aquí la Bernard, es acerca de si fuera de la República Checa es una cerveza tan recomendable- y no pasteurizada. En ese mismo comercio- tiene una sección de cervezas extranjeras bastante bueno, hay un pack de 4 cervezas bernard de 50cl más copa por unos 23 euros. Me parece excesivamente caro no crees??. De todos modos andaré al acecho, como buen "cazaufiertes" que decimos en Asturies, para llevarmela cuando la rebajen jeje.
Un saludo y buena navidad
Lo de Primátor puede que haya sido una especial de navidad, y debo decir que todo lo que hace el Pivovar de Náchod es bueno y vale la pena. Lo mismo puedo decir de Bernard. El precio es un poco salado, incluso teniendo en cuenta el extra del vaso, pero seguramente lo vale si es una cerveza que no vas a poder encontrar habitualmente. Espero que la rebajen después de las fiestas porque no te vas a arrepentir de haberla comprado.
ResponderBorrarImpecable nota de cata de las cervezas. No había posteado de flojo nomás, pero releyendo no pude dejar pasar la oportunidad de celebrar la nueva nomenclatura que, espero, me dejes robar cual ladrón poco ingenioso: "aroma en stereo". ¡Qué bien dicho! Me ha pasado con algunas cervezas en que los aromas aparecen muy marcados y absolutamente diferenciados, linda manera de decirlo.
ResponderBorrarBueno, si le ponés un signo de marca registrada y pagas un canon, lo podes robar las veces que quieras.... ;) Gracias por el comentario....
ResponderBorrarDESDE MIAMI SOY UN AMANTE DE LA CERVEZA CHECA,PRINCIPALMENTE DE LA PILSEN URQUELL,ESTUVE EN PRAGA Y PODEBRADY EN 1986 Y NO E PODIDO DEJAR DE AMAR A LA CULTURA CHECA Y SU BELLO PAIS,PARA MI LA CIUDAD MAS BELLA DEL MUNDO ES PRAGA Y SU ZONA MEDIEVAL,SALUDOS A USTED SOY SU ASIDUO LECTOR
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