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Visitando Parientes

Fuimos el otro día a visitar unos parientes de mi media naranja en Strakonice, una cuidad a unos 160km al Sur de Praga. La excusa, una celebración familiar. El clima estaba ideal para sentarse en el jardín, hacer algo de carne a la parrilla y tomar bastante cerveza (bueno, cualquier clima es bueno para ésto último). La cerveza elegida, por supuesto, fue la del pivovar local Strakonice, principalmente en su versión Švanda, un nuevo integrante en su línea de productos que ha reemplazado la localmente popular "10". Como su antecesora, ésta es una muy buena cerveza de sesión, de amargor ligero, pero con bastante cuerpo y sabor maltoso para su 3.8%ABV. Pero hubo una cosa más que nada que me llamó la atención en la etiqueta.

Durante y luego de la presentación que Pivovar Strakonice hizo en Pivovarský Klub en noviembre del año pasado, Evan Rail y yo nos quejamos sobre algunos de los aspectos del marketing de la empresa. Entre ellos nos sorprendió que, a pesar de serlo, en ningún lugar se mencionaba que las cervezas eran sin pasteurizar. Cuando le pregunté al maestro cervecero por qué no mencionaban algo que muchos cerveceros consideramos, con razón, como un valor agregado en el producto, la honesta respuesta fue que se lo comunicaría al gerente de marketing. Al parecer, así lo hizo y si se fijan en la foto de abajo parte inferior de la etiqueta notarán una palabra que no creo necesite traducción.
"Nepasterované". Cuando la lei no pude más que sonreír y apuntárselo a mi mujer, mientras mi pecho se hinchaba un poco. Me hizo sentir realmente muy bien saber que nuestras observaciones han sido tomadas en cuenta y han tenido cierta influencia en el mundo cervecero, aunque sea en forma de una sola palabra. Pero al parecer no fue ésto lo único a lo que la gente de Strakonice prestó atención. Lanzaron al mercado Klostermann, una amber lager con 5.1%ABV. Coincido con Evan en sus observaciones sobre esta cerveza, muy buena, en la misma categoría que Primátor Polotmavé 13° y Herold Granát, aunque quizás no tan lograda, pero que yo la pondría un escaloncito más arriba que la Master 13°. Me gustaron mucho sus contrastes de notas acaremladas con un refescante final herbal. Por ahora sólo se puede conseguir en su lugar de origen, pero esperemos que empiecen a distribuirla pronto por el resto del país. Por otro lado, parece que Dudák se está convirtiendo en la marca de cabecera de la cervecería, Nektar y 10 ya desaparecieron.
Volviendo al ángulo familiar con el que empezamos, al día siguiente fuimos a pasear a la vera del Otava. No hay demasiado para ver en Strakonice. Salvo el casitllo y un par de edificios en el centro, el resto es un modelo del buen gusto comunista. Sin embargo, el paseo a la vera del río es muy agradable. Con muchos árboles, verde y juegos para chicos. Pasa también pro al lado del pivovar, que lamentablemente estaba cerrado ese domingo, pero aun así podían sentirse los, para mí, deliciosos aromas de cerveza fermentando. Encontramos un jardín cervecero abierto y nos sentamos a pivear un rato. A la vuelta vimos que el jardincito justo al lado del pivovar había abierto. Lo hubiese pasado de largo de no haber sido por un cartel que anunciaba Kvasnicové 12°. Siendo un fanático de este tipo de cervezas, no pude más que obedecer a mis pies y caminar rápidamente al bar pese a los reproches de mi mujer. Lamentablemente sentarme a disfrutar esta para mí nueva cerveza en vaso de vidrio estaba fuera de toda discusión, así que me tuve que contentar con un vaso de plástico que no me dejó apreciar los colores. Lástima, porque si su aspecto era como sus aromas y sabores, hubiese sido una belleza a los ojos. Quizás, debido a los intensos calores, la cerveza estaba uno o dos días pasada, pero aún así, estaba deliciosa. La levadura era la que iba al frente en su bouquet, con matices similares al de algunas Weissbier alemanas, detrás de ella se sentían las frutas de la malta y algo de grano y flores. El sabor era tremendamente refrescante, de nuevo con las levaduras predominando, aquí más hacia el lado de los belgas, el resto, frutas tropicales y algo de hierbas. Disfruté cada trago y rogué para que algún día esta cerveza aparezca en Praga. Quizás tenga que hablar con mis amigos en Pivovarský Klub o Zlý Časy....
Na Zdraví!

Comentarios

  1. Hola MaxB,

    He llegado a tu blog a través de un foro de recomendaciones de Praga. En agosto voy a pasar una semana ahí y después de todo lo que he leído en ese foro sobre timos en restaurantes estoy un poco acojonada :( en fin, me ceñiré a tu lista de restaurantes y a algunos más de los foreros. Soy una gran amante de la cerveza (excepto de la negra!!) así que seguro que en Praga disfruto muchísimo!! Ya estoy tomando nota de algunas cervecerías que se recomiendan (y que no te timan). En fin MaxB, un saludo de una acojonada :)

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  2. hola gritos,
    No tengas miedo de los timos en los restaurantes, son excepciones, aunque más que lamentables. El mejor conesjo es mantenerse alejado de aquellos lugares con grandes carteles en inglés u otro idioma que no sea el checo.
    Dale una oportunidad a las cervezas negras checas, las vas a encontrar distintas a lo que conocés.
    Te deseo un buen viaje y que la pases bien en Praga.
    Saludos

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  3. Pero que sueño del pibe! Que te hagan caso en una cervecería de tus comentarios te da un tremendo valor agregado. Filósofo cervecero y asesor de marketing jejeje.

    Salud!

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  4. Yo creo que, al menos con lo de "nepasterované" le hubiesen prestado atención a cualquiera que se los haya hecho notar. Hoy por hoy, en el mercado checo es algo evidente. Pero fui yo el que se avivó primero y preguntó.

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  5. sr! su página me alucina. Cuando viajé a Praga no pude dejar de pensar en que buen lugar para vivir, y cada tanto tengo recuerdos que me afloran.
    Su blog hace que dia a dia sienta ese aire particular.
    Con respecto a esta cerveza, es una pena no la haya probado, y ahora encima no puedo dejar de pensar como corno conseguirla!
    Lamentablemente aquí, no se traen muchas cosas de afuera...asi que deberé testearla, con un aereo de por medio.

    Saludos

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  6. Lalo,
    Me alegra mucho que te guste tanto el blog y que te traiga tan buenos recuerdos.
    No estabas errado durante tu visita a Praga. Es un muy buen lugar para vivir, realmente estoy muy feliz acá, y no sólo por la buena calidad de cerveza :)
    En cuanto a las cervezas de Strakonice, no hay nada de qué lamentarse, en Praga, salvo alguna que otra botella en Pivovarský Klub o Pivní Galerie, no se consiguen. Están buenas, pero, salvo la kvasnicové, no valen la pena la molestia, diría.

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