Literal y espiritualmente hablando.
Šumavan, mejor conocido como Klášterní Pivnice, está ubicado a pocos metros de un viejo favorito Svijanský Rytíř, en la esquina de Ovenecká y Jirečkova, muy cerca del parque Letná. Es pequeño y dividido en dos salones, a la entrada están los grifos y un par de máquinas tragamonedas y luego el salón principal con mesas y sillas de aspecto cansado, pero acogedor y con una muy linda gama de colores en la decoración, verde oliva en los paneles de madera y terracota en las paredes, que le dan al lugar una atmósfera bastante particular cuando el sol se cuela por las ventanas a la mañana.
Y digo a la mañana porque esta hospoda abre a las 9.30, una rareza. Y es ésa la hora a la que me gusta ir, está casi vacío y muy tranquilo y, mejor aún, todavía se puede respirar, porque una vez que los parroquianos empiezan a llegar el lugar se convierte en una nube de humo y nuestras ropas y personas pronto adquieren un bouquet similar al de un cenicero bien añejado.
Pero antes de que eso pase es una muy agradable hospda para un desayuno tardío.
Tienen una buena selección de snacks rídiculamente baratos y muy buena cerveza, Klášter 11° Světlý, sin pasteurizar por 18,50Kc el medio litro. Dorada como sueño de juventud, con cero carbonación visible y una elegante corona de blanco imaculado. Está tan bien tirada! Su aroma mezcla frutas maduras con hierbas frescas y en sus sabores se notan dejos de caramelo por detrás de notas frutales y de malta, todo condimentado por menta, que domina su corto final. Es un ejemplo perfecto de lo que una buena cerveza de sesión debe ser. En un día de calor, no importa la hora, el primer půl litr desaparece como si el vaso estuviese pinchado en el fondo, para rápidamente ser remplazado por el segundo que se disfruta con más cuidado. Es una cerveza sin pretensiones, pero que lo que hace, lo sabe hacer muy bien.
Pronto las mesas se empiezan a llenar con personajes del barrio cuyo promedio de edad está más cerca al aniversario de la Primera República que el de la Revolución de Terciopelo, todos parecen conocerse y todos parecen viejos conocidos de quien quiera sea esté tirando las cervezas ese día. Y es entonces cuando esta hospoda me hace acordar un poco a esos cafetines de barrio de Buenos Aires, de esos que todavía no han sido víctimas de la modernidad y el plástico.
Termino mi porción de sekana y me segundo půl litr, pago y voy a mi siguiente compromiso del día. Mi humor ha mejorado enormemente y ya estoy pensando cuándo puedo volver a Klašterní Pivnice para darme otro gusto similar.
Klašterní Pivnice Šumavan
Ovenecká 1022/15
170 00 Praha-Holešovice
9.30 - 22.00
Šumavan, mejor conocido como Klášterní Pivnice, está ubicado a pocos metros de un viejo favorito Svijanský Rytíř, en la esquina de Ovenecká y Jirečkova, muy cerca del parque Letná. Es pequeño y dividido en dos salones, a la entrada están los grifos y un par de máquinas tragamonedas y luego el salón principal con mesas y sillas de aspecto cansado, pero acogedor y con una muy linda gama de colores en la decoración, verde oliva en los paneles de madera y terracota en las paredes, que le dan al lugar una atmósfera bastante particular cuando el sol se cuela por las ventanas a la mañana.
Y digo a la mañana porque esta hospoda abre a las 9.30, una rareza. Y es ésa la hora a la que me gusta ir, está casi vacío y muy tranquilo y, mejor aún, todavía se puede respirar, porque una vez que los parroquianos empiezan a llegar el lugar se convierte en una nube de humo y nuestras ropas y personas pronto adquieren un bouquet similar al de un cenicero bien añejado.
Pero antes de que eso pase es una muy agradable hospda para un desayuno tardío.
Tienen una buena selección de snacks rídiculamente baratos y muy buena cerveza, Klášter 11° Světlý, sin pasteurizar por 18,50Kc el medio litro. Dorada como sueño de juventud, con cero carbonación visible y una elegante corona de blanco imaculado. Está tan bien tirada! Su aroma mezcla frutas maduras con hierbas frescas y en sus sabores se notan dejos de caramelo por detrás de notas frutales y de malta, todo condimentado por menta, que domina su corto final. Es un ejemplo perfecto de lo que una buena cerveza de sesión debe ser. En un día de calor, no importa la hora, el primer půl litr desaparece como si el vaso estuviese pinchado en el fondo, para rápidamente ser remplazado por el segundo que se disfruta con más cuidado. Es una cerveza sin pretensiones, pero que lo que hace, lo sabe hacer muy bien.
Pronto las mesas se empiezan a llenar con personajes del barrio cuyo promedio de edad está más cerca al aniversario de la Primera República que el de la Revolución de Terciopelo, todos parecen conocerse y todos parecen viejos conocidos de quien quiera sea esté tirando las cervezas ese día. Y es entonces cuando esta hospoda me hace acordar un poco a esos cafetines de barrio de Buenos Aires, de esos que todavía no han sido víctimas de la modernidad y el plástico.
Termino mi porción de sekana y me segundo půl litr, pago y voy a mi siguiente compromiso del día. Mi humor ha mejorado enormemente y ya estoy pensando cuándo puedo volver a Klašterní Pivnice para darme otro gusto similar.
Klašterní Pivnice Šumavan
Ovenecká 1022/15
170 00 Praha-Holešovice
9.30 - 22.00
Hola Filósofo.
ResponderBorrarAcabo de hacer una viaje a Praga y me llevé anotadas las direcciones de algunos sitios de los que hablas en tu blog y en el foro de viajeros. Hemos estado en Plzensky Sklipek, en Basta, en Svijansky Rytir, en Zlaty Klas y en Ferdinanda.
Todos los sitios nos han gustado porque se salen del perfil del restaurante para turísta que es lo que ibamos buscando.
Sobretodo la cerveza de Ferdinanda me ha parecido estupenda. Me gusta la cerveza negra y esta tenía un delicioso sabor final entre café y caramelo.
Muchas gracias por toda la información que das en tu blog :)
Sanet,
ResponderBorrarMe alegro mucho que mis divagaciones hayan hecho de tu viaje una experiencia todavía más agradable.
Hola, filosofo, voy a agregar tu blog a mi lista de blogs cerveceros. Llevo tiempo leyendolo y la verdad es que para los que estamos "pez" en las cervezas checas es un lujo.
ResponderBorrarSaludos desde Asturias
Hola Max.
ResponderBorrarYo también acabo de regresar de Praga y me han venido maravilla tus consejos. Gracias mil. Como esta la Kozel de U Černého Vola mmmm... que sitio y que buen precio. Me encantaron las 3 cervezas sin pasteurizar que probamos en Svijanský rytíř. La comida y sobretodo las cervezas de
Pivovarský Dum buenisimas. Me sorprendió la que lleva ortigas,por ser algo totalmente nuevo para mi, aunque las de trigo y ležák son insuperables. Riquísima la comida la de Malostranská Pivnice.Pero sin duda me quedo con U Medvídků, la Oldgott me parecio exquisita, pero su hermana mayor X33, es un manjar. No he probado hasta la fecha mejor cerveza que esta, sin duda vale la pena las 111 coronas que cuesta. Muchísimas gracias de nuevo Max, por descubrirme esto lugares. Un saludo.
Max, tenes que pensar seriamente en ofrecer tus servicios de filosofo y guía turístico cervecero... "Conozca Chequia a través de sus cervezas" que bueno! yo compraría feliz un tour así! :)
ResponderBorrarPeter, lo de los tours es algo que sí tengo pensado. Es más, lo quería hacer este año, pero por una cosa o por la otra no pude arrancar y decidí dejarlo para el año que viene.....
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