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La Ronda #6: Mujeres, Seducción y Cervezas

Otro mes, y otra edición de "La Ronda", el proyecto comunitario de los blogs cervecereos hispanos ¡Y cómo me gusta!

Luego de la polémica edición del mes pasado. Nuestro chilenísimo amigo Catador propone un tema más liviano, pero no por ello, menos interesante y divertido:
"La cosa va así: de alguna manera conociste a una señorita y ésta, luego de saber tu afición por las cervezas, te pide la invites a una cata personal, proponiendo tú, ni tonto ni perezoso, tu humilde morada.
¿Qué cervezas le darías a probar, y para qué fines?"
Estoy felizmente casado y sólo tratar la premisa tal cual como está planteada me traería algunos problemas. Con mi mujer, no lo puedo hacer porque al tener la suerte de vivir conmigo, como se imaginarán, ya conoce todas las cervezas. Así que decidí darle una vuelta de tuerca al asunto y encararlo de otro modo, ayudando a un hipotético amigo que se encuentra en la misma situación. Así es como me lo he imaginado:

Me encuentro sentado al lado del hogar, junto con mi esposa. Estamos escuchando música, comiendo delicioso pastel de arándanos casero y tomando Pardubický Porter a temperatura ambiente. El timbre suena justo en el momento en que estoy empezando a preparar mi pipa. Mi mujer se levanta a atender la puerta y vuelve acompañada de mi jóven amigo Svatopluk, a quien, a manera de mentor, he estado iniciando en el mundo de la cerveza de verdad.
Luego de saludarnos, Svatopluk me dice, con tono preocupado. "Necesito tu ayuda. Estoy cortejando a una chica que me tiene loco. Ya hemos salido varias veces y la cosa va muy bien. El problema es que ella quiere venir a mi casa para que le muestre algunas de las maravillosas cervezas de las que le he estado hablando y tanta curiosidad le han causado ¿Qué puedo hacer? Tengo miedo de meter la pata."
"Y esta chica te gusta mucho", digo y enciendo mi pipa. Mi amigo asiente, toma el vaso que mi mujer le ofrece y se pasa a servir de la Porter.
Acaricio mi barba, me tomo unos instantes para pensar y digo."Ya lo tengo. Toma nota amigo mío".
Svatopluk saca un anotador y un bolígrafo y con atención escucha mi consejo.
"La recibirás con una copa de Černá Hora Modrá Luna. Sí, sí", digo, anticipándome a su objeción. "Sé que a tí mucho no te gusta, pero a Ella seguro que sí, más si junto con la cerveza le ofreces una tabla de quesos suaves, uvas y almendras".
Svatopluk toma nota con entusiasmo y yo le pregunto:
"¿Cómo se llama la niña?"
"Markéta, y es hermosa, un ángel." Dice con ojos de ensueño.
"No esperaría menos de tí, amigo mío. Y dime, a Markéta, le gustan los frutos de mar?"
"Sí, mucho"
"Ah! Bien!" Digo con alivio al ver que mi plan no tendría complicaciones. "Entonces, como primer plato prepararás langostinos saltados en manteca y aceite de oliva, con ajo, un poco de gengibre y menta fresca. De guarnición, una ensalada verda aderezada con una salsa de anchoas picadas, yogurt natural, aceitde de oliva, orégano y cebollín."
"¡Oh! ¡Eso suena delicioso!" Responde Svatopluk, al tiempo que la duda invade sus facciones."Pero ¿Con qué puedo acompañar el plato?"
"Con Primátor Weizen, por supuesto"
"¡Claro!" Casi grita Svatopluk "A las chicas les gusta mucho, es fácil de tomar, no es tan ácida como otras y su sabor y características la hacen ideal para acompañar un plato como éste."
"Tal cual. Estás aprendiendo, mi jóven amigo." Digo, con satisfacción.
Casi tímidamente, pero a la vez con confianza, Svatopluk me pregunta: "¿Puedo sugerir el segundo plato?"
"Pero ¡Por supesto!" Su entusiasmo es contagioso y dentro mío, sé que su idea será la adecuada.
"¿Qué tal si preparo tu receta de cerdo con mermelada de cerveza?
"Me sorprendes, era justamente lo que estaba pensando. Como gaurnición te recomiendo polenta frita o asada"
"Sí, sí! Y podría acompañarlo con Bernard Jantár"
"Buena idea. Como alternativa podrías considerar Strakonice Klostermann o Herold Granát. Son un poco más fuertes" Y guiño un ojo, sólo pare recibir la mirada de reproche de mi mujer. Le sonrío, indicando que es sólo una broma y continúo.
"Por supuesto que le tienes que ofrecer postre"
"Oh! Sí, no había pensado en ello, casi nunca como postres, pero esta será una ocasión especial ¿Qué me recomiendas?" Su gesto no indicaba temor, sino sólo verdaderas ganas de aprender algo nuevo.
"Flan. Creo que tengo una receta en algún lado. Toma algo de tiempo, pero no es difícil de hacer. Tendrás que elegir una cerveza oscura de las dulces. Quizás Chodovar Černá Desítka o Polička Hradební Tmavé o, si quieres algo más fuerte, Svijanská Kněžna. Sus notas acarameladas, seguro serán buen acompañamiento para el flan"
"¡Gracias!" Exclama Svatopluk casi saltando de su asiento. "Ya mismo voy corriendo a comprar todo"
"Espera pequeño saltamontes. No seas apresurado, que la velada no ha terminado".
Svatopluk vuelve a tomar asiento, su rostro invadido de curiosidad.
"¿Qué tan importante es esta Markéta para tí?"
"Ni te imaginas cuanto." Me contesta, suspirando.
"Entonces aguarda un minuto". Le digo y voy al sótano desde donde traigo dos botellas de X33.
Al dárselas a Svatopluk, le digo. "No debes olvidarte del golpe de gracia. Acompañarás esta cerveza con una seleccion de chocolates finos, mientras escuchan música y las sigues seduciendo".
Svatopluk estrecha las botellas contra su pecho y sonríe como un niño.
"Si luego de esté festín a Markéta no se le aflojan las bragas, no es la mujer para tí." Tanto el reproche de mi esposa como la cara de susto de Svatopluk no pueden más que hacerme reír.
"No temas, no temas, mi joven amigo. Estoy seguro que la cita terminará en pasión y continuará en romance a partir de la mañana siguiente."
La sonrisa vuelve al rostro de Svatopluk, quien ya no puede contener su entusiasmo. "¡Tus consejos son tan sabios! Esta será una velada que Markéta nunca olvidará en su vida. ¿Cómo puedo agradecer tu invaluable ayuda?"
Fumo de mi pipa y le palmeo suavemente la espalda. "No tienes nada que agradecer amigo. Fui también jóven y sé lo importante que es encontrar una buena mujer." Digo con una sonrisa, mientras estrecho la mano de mi princesa. "Ve. Te deseo mucho suerte. Saluda a esa seguramente maravillosa doncella de mi parte."
Cuando Svatopluk parte hablando con sí mismo de dónde tendría que ir a comprar los ingredientes y las cervezas, me vuelvo a mi mujer, la beso en los labios y le pregunto. "Lásko muj* ¿No tienes hambre? ¿Qué tal si preparamos algo de comer?"

Na Zdraví!

(*) Amor mío, en checo.

Comentarios

  1. Simplemente genial, sólo falto que luego llegara otro amigo y te pidiera ayuda para resolver el misterio de las cervezas perdidas!. Me sonó muy a novela policial, genial entrada, que ya lo dije pero hay que decirlo dos veces.

    Y la Pardubický Porter, está muy buena!

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  2. Muy bueno Max, me he reído un rato con tu entrada. Y la selección, maravillosa. Casi desearía ser yo la invitada de tu amigo!

    Bueno... no.

    Un saludo!

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  3. Jajaja, cuidado con querer ser la invitada que seguro quien te invita querrá algo más que compartir unas cervezas jaja.

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  4. Jaja!!! Delirium ha mostrado la hilacha!!
    Quizás con una peluca y algo de maquillaje, y después de unas cervezas, puede que Svatopluk no tenga problemas....

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  5. Muy buena la novela, una buena forma de cubrirte las espaldas!!jajaja

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  6. Buen relato, Max.

    Y poner la X33 como guinda del pastel no hace más que acrecentar mis expectativas sobre esa cerveza.
    ¡Que ganas tengo de probarla!

    Salud, Andrés.

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  7. Plas, plas, plas. Vyborne kamarade!

    A ver si vuelvo pronto por CR, tengo ganas de probar la Modrá Luna, aquí no creo que se pueda conseguir

    S pozdravem ze Spanelska
    Mizar

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  8. Extraordinaria entrada. A sus pies caerá rendida.

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  9. Pivni, IDOLO, me demostro que no solo es un caballero sino que es todo un romantico y me hizo quedar a mi con mi relato como un leon cazador sediento de sangre jajajaja

    Mis felicitaciones nuevamente.

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