Hacía rato que le debía una reseña a Kulový Blesk, pero tenía ganas de probar la comida primero, algo que por varios motivos no pude hacer sino hasta el otro día.
Kulový Blesk está ubicado en Sokolská, una de las peores arterías praguenses, ejemplo de la falta de visión del regimen comunista (a quién se le puede ocurrir trazar una autopista cruzando el centro de una gran ciudad, es la única en el mundo que tiene que detenerse para dejar paso al tranvía). Es tremendamente ruidosa, caminar por allí es horrible (ni me quiero imaginar lo que debe ser vivir) y el tráfico peatonal es casi inexistente. De no ser por el serivdor Pivní Info no creo que lo hubiese encontrado. Hubiese sido una verdadera lástima. A nivel de la calle hay un agradable y sorprendentemente poco ruidoso patio (sin servicio), la hospoda propiamente dicha se encuentra en un profundo sótano dividido en varios salones pequeños. Todos son no fumadores y están decorados de manera bastante agradable, mobiliario baqueteado, pintado a mano y paredes cubiertas de carteles y fotos de clásicos de la filmografía checa, lo cual le da al lugar una atmósfera más de café-restaurante que de pub.
Se trata de una de las varias hospody cuyos dueños han decidido abandonar las grandes marcas y adoptar el modelo de cervezas rotativas, en este caso en nueve grifos con selecciones algo inconsistentes en lo que respecta a la variedad. Entre las cervecerías con presencia más o menos permanente se encuentran Primátor, Kocour, Matuška y últimamente parece que Kout (el otro día la tenían mejor que en Lípy), todas en muy buenas condiciones.
La comida, teniendo en cuenta lo que pedí el otro día y las referencias que he recibido, no es nada memorable, pero aun así bastante buena (el spanělský ptáček y su salsa estaban buenísimos, no tanto así el arroz).
Pero lo mejor de Kulový Blesk, y lo que mejor impresión me causó desde el primer día, es el servicio. Como Pivovarský Klub en sus mejores días, los camareros están bien informados sobre las cervezas que están vendiendo. Las veces que he ido en las tempranas horas de la tarde, cuando la hospoda está bien tranquila (¡cómo me gusta ir a tomar algo a esas horas!) quien sea que haya estado atendiendo me preguntó qué tal me gustaba la cerveza que estaba tomando, pero no en la manera robótica común a las cadenas de restaurantes, sino con genuino interés que más de una vez desembocó en una conversación sobre el resto de la oferta u otras cervezas que tenían preparadas. Y no sólo están informados, sino que son capaces de recomendar. En mi visita durante el almuerzo el lugar estaba bastante lleno y aun así el servicio con gusto se tomaba el tiempo necesario para explicarle a aquellos que esperaban encontrar Pilsner Urquell la oferta cervecera del día y sugerir basado en los gustos de los clientes, en cada caso, dejándolos satisfechos.
Definitivamente un lugar muy recomendable y que merece mayor reconocimiento. Si están en Praga, no se lo pierdan
Na Zdraví!
Kulový Blesk
Sokolská 13, Praga 2
+420 721 420 859
PS: Disculpen la falta de fotos. Creo que perdí las que tenía, prometo agregar algunas en cuanto pueda...
Kulový Blesk está ubicado en Sokolská, una de las peores arterías praguenses, ejemplo de la falta de visión del regimen comunista (a quién se le puede ocurrir trazar una autopista cruzando el centro de una gran ciudad, es la única en el mundo que tiene que detenerse para dejar paso al tranvía). Es tremendamente ruidosa, caminar por allí es horrible (ni me quiero imaginar lo que debe ser vivir) y el tráfico peatonal es casi inexistente. De no ser por el serivdor Pivní Info no creo que lo hubiese encontrado. Hubiese sido una verdadera lástima. A nivel de la calle hay un agradable y sorprendentemente poco ruidoso patio (sin servicio), la hospoda propiamente dicha se encuentra en un profundo sótano dividido en varios salones pequeños. Todos son no fumadores y están decorados de manera bastante agradable, mobiliario baqueteado, pintado a mano y paredes cubiertas de carteles y fotos de clásicos de la filmografía checa, lo cual le da al lugar una atmósfera más de café-restaurante que de pub.
Se trata de una de las varias hospody cuyos dueños han decidido abandonar las grandes marcas y adoptar el modelo de cervezas rotativas, en este caso en nueve grifos con selecciones algo inconsistentes en lo que respecta a la variedad. Entre las cervecerías con presencia más o menos permanente se encuentran Primátor, Kocour, Matuška y últimamente parece que Kout (el otro día la tenían mejor que en Lípy), todas en muy buenas condiciones.
La comida, teniendo en cuenta lo que pedí el otro día y las referencias que he recibido, no es nada memorable, pero aun así bastante buena (el spanělský ptáček y su salsa estaban buenísimos, no tanto así el arroz).
Pero lo mejor de Kulový Blesk, y lo que mejor impresión me causó desde el primer día, es el servicio. Como Pivovarský Klub en sus mejores días, los camareros están bien informados sobre las cervezas que están vendiendo. Las veces que he ido en las tempranas horas de la tarde, cuando la hospoda está bien tranquila (¡cómo me gusta ir a tomar algo a esas horas!) quien sea que haya estado atendiendo me preguntó qué tal me gustaba la cerveza que estaba tomando, pero no en la manera robótica común a las cadenas de restaurantes, sino con genuino interés que más de una vez desembocó en una conversación sobre el resto de la oferta u otras cervezas que tenían preparadas. Y no sólo están informados, sino que son capaces de recomendar. En mi visita durante el almuerzo el lugar estaba bastante lleno y aun así el servicio con gusto se tomaba el tiempo necesario para explicarle a aquellos que esperaban encontrar Pilsner Urquell la oferta cervecera del día y sugerir basado en los gustos de los clientes, en cada caso, dejándolos satisfechos.
Definitivamente un lugar muy recomendable y que merece mayor reconocimiento. Si están en Praga, no se lo pierdan
Na Zdraví!
Kulový Blesk
Sokolská 13, Praga 2
+420 721 420 859
PS: Disculpen la falta de fotos. Creo que perdí las que tenía, prometo agregar algunas en cuanto pueda...
Es que el arroz y los checos, no se llevan muy bien, no?...al menos mi experiencia con ellos (tengo muchos amigos) es que nada de arroz y si algo de papas, pero tampoco pongas mucho....
ResponderBorrarInteresante sitio que espero visitar cuando te visite...!!
saludos!
p.d has pensado en venir al festival de Mediona....no hay problema si queres quedarte aca...estoy a 30 km. y voy...ya diras algo...
Acá se come bastante arroz, pero el que me sirvieron ahí era del tipo desgranado, gomoso, me gusta más el más pegote y pastoso....
ResponderBorrarAl festival, ni de casualidad, lástima, será otro año...
El sábado justo antes de cojer el avión de vuelta a España me pasé por allí para comer con la mala suerte de que los sábados a medio día no abren... Para otra vez...
ResponderBorrarEn cuanto al Zlý Casy, que maravilla de sitio. Ver todos esos grifos juntos, los carteles con la información sobre las cervezas pinchadas...
Al verlo, entré en extasis como Santa Teresa.
Una pena Daniel, que no coincidiéramos; yo estuve en Praga la última semana de abril.
ResponderBorrarDe los multigrifos que conocí, el que más me gustó. Más que recomendable para turistas, que no tendrán que salir a Nusle para Zly Casy, Smichov para U Prince Miroslava o Zizkov para Novy Svet.
Probé seis de las ocho cervezas que se ofrecían. La 12 de Kout de leyenda, pero la de Viskov nada mal. La Stout de Primator merece la pena y la polotmave de Primator (bebí tanto que no la recuerdo) la tengo con una nota positiva en mis apuntes. Mi compañero, que bebía trigo ( amí no me gusta) me dijo que la Matuska fue, junto a la de U Bilovky, la mejor que bebió.
Una camarera, alta, gordita y con el pelo creo que teñido de rubio fue amabilísima. Una cordialidad poco reconocible en una zona que si no es turística,está al lado.
Como soy fumador, salí un par de veces y testifico que lo del tráfico es cierto. me quedé asustado. Le comenté a mi acompañante que en Roma parecen suizos al lado de los praguenses cuando toman el volante.
Turistas cerveceros: no se lo pierdan. Cerca del Pivovarsky Dum, del metro IP Pavlova y de las torres de Santa Liudmila en Namesty Miru.