Tanto me gustaron las cervezas de Únětický Pivovar y tan bien la pasé en ese lugar tan lindo que apenas volví a casa esa tarde decidí que tenía que volver, pero disfrazado de periodista. Así que llamé a Jítka Menclová, la encargada de RRPP, y arreglé una visita para el miércoles pasado.
Esta vez no llovío mientras caminaba desde la parada del bondi hasta la cervecería y como iba con bastante tiempo decidí tomar un camino alternativo que resultó ser más corto.
Jítka llegó un rato más tarde y la visita empezó en compañía también de uno de los Maestros Cerveceros. Estoy preparando un artículo más detallado sobre la cervecería que, si es aceptado, aparecerá en algún futuro número de Bar&Beer, pero igual quería compartir algunas de las cosas que me contaron.
Únětický Pivovar no es un brewpub, es una fábrica de cerveza que, como muchas otras, tiene un bar, o výčep, como se dice en checo. El bar y el jardín ya se encuentran funcionando a pleno, los horarios son Mar-Vie: 15-22, Sáb-Dom: 11-22. Se sirven solamente sopas y algunos otros platos chicos para acompañar las cervezas, de cuyos ingredientes tratan de proveerse de productores cercanos. Tal como había dicho el otro día, el salón del bar es la antigua maltería, además de ser la parte más antigua del edificio.
Las cervezas también se pueden comprar en botellas de plástico, botellones de vidrio de 2l o barriles para llevar a casa, aunque para ello hay que llamar antes. Me dijeron que les está yendo muy bien con las botellas y doy fe, mientras estaba esperando a Jítka, ese miércoles antes del mediodía, vi un par de autos parar a comprar botellas.
Además de vender cerveza y comidas, también se organizan en las instalaciones, en especial en el antiguo establo, diversas actividades culturales, algunas de ellas en conjunto con la municipalidad. Este sábado, por ejemplo, se puede ir al festival del solsticio. El programa de actividades se puede ver en esta página, solamente en checo.
La fábrica.
No me quisieron dar cifras, pero me dijeron que la inversión fue muy importante. Tuvieron suerte de que el edificio había sido mantenido en muy buen estado, pero aun así, reacondicionarlo para vuelva a ser una cervecería requirió mucho dinero.
Los equipos son de la más moderna tecnología, y son muy lindos. Tienen una capacidad de cocción de 25hl. Las dos cervezas que por ahora elaboran, una 10º y otra 12º, siguen recetas procesos clásicas, triple decocción, etc. Las maltas tipo pilsen se las compran a una "micro-maltería", los lúpulos son Saaz en pelets, las levaduras provienen del Instituto Checo de Investigación en Cervecería y Maltería, y cada partida es utilizada seis veces.
La cerveza fermenta en dos tanques abiertos, cada uno con 50hl, o sea en cada uno fermentan dos tiradas. La desítká fermenta por siete días, la dvanáctká por un mínimo de diez.
De ahí pasan a madurar. 7 tanques cada uno con 50hl de capacidad tienen por ahora, con espacio para agregar algunos más. Las cervezas se comercializan tanto sin filtrar, como filtradas. Pude probar la desítká filtrada y es muy rica, ni hablar de la 12º tirada directo de uno de los tanques. De putísima madre.
Tienen planes ambiciosos. Este año esperan producir 1500hl y apuntan a llegar a los 10000hl en 3 a 5 años. Tienen contemplado eventualmente instalar una línea de envasado para poder vender la cerveza en botellas retornables, pero para ello habrá que esperar. Ya están planeando también dos cervezas especiales, una de otoño que estaría lista para el 28 de septiembre, y otra de navidad, aunque todavía no se han decidido por las recetas.
Tanto el director de la cervecería (y el padre de la idea), como el Maestro Cervecero que me acompañó, supieron trabajar en Staropramen. En el caso del director, dejó la empresa porque se cansó de su filosofía.
La verdad que el lugar es muy lindo y las cervezas tremendamente ricas. Gracias Jítka por la hospitalidad y por los datos.
Na Zdraví!
PD: Pero el día no terminó ahí. A la visita a la cervecería le siguió en excelente paseo, ya les voy a contar el lunes.
Esta vez no llovío mientras caminaba desde la parada del bondi hasta la cervecería y como iba con bastante tiempo decidí tomar un camino alternativo que resultó ser más corto.
Jítka llegó un rato más tarde y la visita empezó en compañía también de uno de los Maestros Cerveceros. Estoy preparando un artículo más detallado sobre la cervecería que, si es aceptado, aparecerá en algún futuro número de Bar&Beer, pero igual quería compartir algunas de las cosas que me contaron.
Únětický Pivovar no es un brewpub, es una fábrica de cerveza que, como muchas otras, tiene un bar, o výčep, como se dice en checo. El bar y el jardín ya se encuentran funcionando a pleno, los horarios son Mar-Vie: 15-22, Sáb-Dom: 11-22. Se sirven solamente sopas y algunos otros platos chicos para acompañar las cervezas, de cuyos ingredientes tratan de proveerse de productores cercanos. Tal como había dicho el otro día, el salón del bar es la antigua maltería, además de ser la parte más antigua del edificio.
Las cervezas también se pueden comprar en botellas de plástico, botellones de vidrio de 2l o barriles para llevar a casa, aunque para ello hay que llamar antes. Me dijeron que les está yendo muy bien con las botellas y doy fe, mientras estaba esperando a Jítka, ese miércoles antes del mediodía, vi un par de autos parar a comprar botellas.
Además de vender cerveza y comidas, también se organizan en las instalaciones, en especial en el antiguo establo, diversas actividades culturales, algunas de ellas en conjunto con la municipalidad. Este sábado, por ejemplo, se puede ir al festival del solsticio. El programa de actividades se puede ver en esta página, solamente en checo.
La fábrica.
No me quisieron dar cifras, pero me dijeron que la inversión fue muy importante. Tuvieron suerte de que el edificio había sido mantenido en muy buen estado, pero aun así, reacondicionarlo para vuelva a ser una cervecería requirió mucho dinero.
Los equipos son de la más moderna tecnología, y son muy lindos. Tienen una capacidad de cocción de 25hl. Las dos cervezas que por ahora elaboran, una 10º y otra 12º, siguen recetas procesos clásicas, triple decocción, etc. Las maltas tipo pilsen se las compran a una "micro-maltería", los lúpulos son Saaz en pelets, las levaduras provienen del Instituto Checo de Investigación en Cervecería y Maltería, y cada partida es utilizada seis veces.
La cerveza fermenta en dos tanques abiertos, cada uno con 50hl, o sea en cada uno fermentan dos tiradas. La desítká fermenta por siete días, la dvanáctká por un mínimo de diez.
De ahí pasan a madurar. 7 tanques cada uno con 50hl de capacidad tienen por ahora, con espacio para agregar algunos más. Las cervezas se comercializan tanto sin filtrar, como filtradas. Pude probar la desítká filtrada y es muy rica, ni hablar de la 12º tirada directo de uno de los tanques. De putísima madre.
Tienen planes ambiciosos. Este año esperan producir 1500hl y apuntan a llegar a los 10000hl en 3 a 5 años. Tienen contemplado eventualmente instalar una línea de envasado para poder vender la cerveza en botellas retornables, pero para ello habrá que esperar. Ya están planeando también dos cervezas especiales, una de otoño que estaría lista para el 28 de septiembre, y otra de navidad, aunque todavía no se han decidido por las recetas.
Tanto el director de la cervecería (y el padre de la idea), como el Maestro Cervecero que me acompañó, supieron trabajar en Staropramen. En el caso del director, dejó la empresa porque se cansó de su filosofía.
La verdad que el lugar es muy lindo y las cervezas tremendamente ricas. Gracias Jítka por la hospitalidad y por los datos.
Na Zdraví!
PD: Pero el día no terminó ahí. A la visita a la cervecería le siguió en excelente paseo, ya les voy a contar el lunes.
exelente nota , envidia sana chupetiendo la birra del tanque directo .
ResponderBorrarUna cosa , me cuesta chupar birra con sopa , es asi o soy yo un poco retisente ? Haber yo necesito morder algo cuando chupo birra se entiende ?
saludos
omar
Beer is life seria el titulo perfecto excelente review,me gusto mucho las fotos del lugar tiene un aspecto a cerveceria de pueblo (por lo q se ve en las fotos)y envidia sana tambien por verte tomar 12* del tanque!
ResponderBorrarCheers!
Muy buena nota y ni hablar del equipo!!!!!!!!
ResponderBorrarfelicitaciones
Es una cervecería de pueblo. El edificio es original del s. 18. Gran parte de los interiores está en muy buen estado y el contraste de la arquitectura tan vieja con los equipos tan modernos es bastante lindo.
ResponderBorrarUna curiosidad, Max, ahora que se te nota contento con esta nueva cervecería praguense.
ResponderBorrarEn tu libro hablas de los brew pubs de Praga, e incluso mencionas Chyne, Beroun o Kladno. Sin embargo, sólo hay una breve referencia a Třebonice. tampoco está tan presente en el blog.
Es casualidad? O hay algo que no te gusta? la Geronimo que bebí contigo me pareció muy rica...
Me gustan mucho las birras de Třebonice y de hecho conozco al dueño, pero hasta donde yo sé el tipo solo elabora durante los meses de invierno y el pub durante esta temporada está cerrado.
ResponderBorrarFui a visitarlo el año pasado, pero fue justo antes de que termine la temporada de elaboración y al final no llegué a tiempo para escribir nada. Le debo una a David.